Carta "Solicitud de Perdón Publico de JAIR EDUARDO RUIZ SANCHEZ" a sus VICTIMAS Directas e indirectas

SOLICITUD DE PERDON PUBLICO A LAS VICTIMAS DE JAIR EDUARDO RUIZ SANCHEZ, Desmovilizado exbloque Vencedores de Arauca. comunicado leido en la Emisora CARACOL de Yopal (Casanare)

Señores Victimas y afectados en Guaviare, Meta, Casanare y Arauca por acciones cometidas en mi militancia dentro de los bloques Centauros, frentes: Guaviare, Meta y Casanare.  Y Bloque Vencedores del Arauca, Soy  JAIR EDUARDO RUÌZ SANCHEZ, conocido en la ilegalidad con los alias de: Nicolas, Pagado, Gordo Pompilio, Móvil 8. 

En este momento de  mi vida, quiero hacer un alto, para presentar ante ustedes mi reflexión acerca de los hechos que me han llevado a estar en calidad de interno en un establecimiento penitenciario y respondiendo por los actos cometidos en desarrollo de mi actividad dentro de los bloques Centauros, frentes, Guaviare, Meta y Casanare y Bloque Vencedores del Arauca.

 Es necesario contar uno de los hechos que marcó mi vida y el cual de alguna manera no fue la razón para tomar decisiones después.  Era el mes de marzo de 1991, cuando fue asesinado mi padre a manos de una de las guerrillas que operan en el Departamento de Arauca, mi lugar de origen. Contaba con 19 años de edad, correspondiendome por tal falta asumir de alguna manera el lugar de jefe de la casa, sin dejar de lado los problemas naturales de la juventud.

 Sabido es que la situación de los colombianos, y especialmente en los llanos,  ha estado enmarcada en un ambiente permanente de violencia, desde que nuestros padres alcanzaron el uso de la razon. 

 Se presento entonces la oportunidad de ingresar a las filas de una entidad que parecía la respuesta sensata a tanta violencia que nos venía azotando, consistente en atacar directamente a los vìctimarios "las guerrillas Comunistas", haciendo parte de las autodefensas unidas de Colombia, aportando mi arte y conocimientos en Administracion y sistemas, porque –sea el momento para aclara que jamás tuve la potestad de decidir sobre la vida o  muerte de alguien, pero ello no me impidió solicitar en su momento la revocación de ordenes de homicidio en contra de personas de quienes en mi buen sentido sabía no se encontraban relacionados con la contraparte de nuestro conflicto.  

Sin embargo, ahora cuando se ha parado, nos hemos sentado y podemos pasar largas horas sabiendo de todos los actos que acabaron con tantas vidas, causaron daños ecónomicos, dejaron huellas sicológicas en tantas personas por haberseles coartado sus libertades, puedo decir que tal vez no fue la mejor idea.  Y digo esto, en lugar de señalar que fue una equivocación absoluta porque todo se ha dado por la grave falta de Estado, reflejado en la ineficiencia de las autoridades obligadas a velar por la seguridad, vida, honra, protección y paz de los colombianos.

 De esta manera tomé la determinación de desmovilizarme en forma colectiva, en el preciso momento en que los grandes comandantes lo ordenaron, con el fin de contribuir si no a el logro directo de la paz, si a una atenuanción del conflicto, creyendo que las autoridades legítimamente constituidas habían retomado en gran medida el control del orden público de nuestro paìs. Y valga el momento para recordarles que me entregué voluntariamente a este proceso de Justicia, paz y reparación, colaborando para la construcción histórica de la verdad y homenaje a las víctimas del accionar de las mal llamadas Autodefensas Unidas de Colombia.

 Es así como quiero decirle a usted, viuda, viudo, huerfáno, huerfana, familiar, amigo, vecino o simplemente conocido de persona secuestrada, desaparecida, asesinada, torturada, entre otros vejamenes cometidos de manera injustificada: perdón, perdón por haber intentado con mi propio esfuerzo suplir la ausencia de las autoridades en el combate contra las guerrillas Comunistas, Perdón por no haber podido evitar medidas de corrección tan dolorosas para ustedes como fue la desaparición forzada, los homicidios, los secuestros y demas violaciones contempladas en el Derecho Internacional Humanitario; acciones cometidas en contra de tantas personas bajo criterios de los cuales la organización perdió el control.

 Al resto de Colombia y al mundo presento también mis excusas por haber tomado el mal camino, el camino corto de la violencia, pensando que nuestras vidas mejorarían.

 También aprovecho para decirles: no sientan temor en acercarse a las Fiscalías de Justicia y Paz a denunciar los hechos que los vitimizo, para reclaramar la restauración, mediante sesiones donde ofreceré mis excusas personalmente y posiblemente pueda decidir u ofrecer una reparación económica compensatoria por los daños ocasionados con nuestras acciones.  Acudan al apoyo de un abogado, háganse parte en este proceso porque de lo contrario no tendrá sentido la desmovilización, ni mi acto personal de arrepentimiento. El que no reclame mediante los procedimientos para ser reconocido como víctima, no podrà tener ninguna reparación individidual o concreta porque el Estado no hace cosa diferente de presentar las herramientas, lo cual ya está dado, solo falta su presencia.

 Atentamente,

 JAIR EDUARDO RUÍZ SANCHEZ

CC 91.288.183 de Bucaramanga

Desmovilizado Colectivo exbloque Vencedores de Arauca.

Certificacion Lectura Carta "Solicitud de Perdón"